Sólo tú

Es sólo con tus ojos que aprendí a mirar el mundo, a observar la belleza de una sonrisa, la dulzura de unos ojos soñadores, la perfección de una mirada sincera...

Aprendí a ver mas allá de mis ojos, a observar con detenimiento las perfectas imperfecciones que hacen de un instante mágico, ese instante junto a ti.

Es sólo con tus manos que mi piel se enciende, que me siento protegida del mundo a salvo de mis propios miedos... 

Son tus brazos quienes me cubren del frío de las miradas, de la inmensa soledad...

Aprendí a refugiarme en tu calor, a tener seguridad por ti, para ti...

Es sólo con tu piel que mi alma es completa, que el mundo se detiene y gira mas allá del sol, que la luna brilla en su máximo esplendor y que la lluvia acompasa mis deseos...

Es en tu piel que mis sentidos se agudizan que mis pensamientos se nublan y pierdo el control...

Son tus besos, crueles carceleros de mis labios, aquellos dueños de mis sonrisas...

Hacedores de mis más grandes fantasías...

Tus besos que encienden mi pasión, y entierran mis miedos... 

Tus besos.. Esos tus besos.. 

Eres tú, sólo tú, quien encierra en un segundo toda la magia que me hace soñar, que me eleva hacia la luna y me regresa a la tierra... 

Porque eres sólo tú lo que necesito ...

Eres la luz y la oscuridad... 

Sólo tú

Hoy caminé de tu mano

Hoy caminé de tu mano, miré al cielo de una forma diferente, tenía otro color...
Miré tu cara, la paz que me da tu mirada, la suavidad de tus líneas en el rostro, observé con mucho detalle tu fina sonrisa, aquella que ilumina mis mas oscuros temores.
Hoy caminé de tu mano, y sentí el calor de tu piel, sentí tu miedo, aquel que te envuelve cuando miras mis ojos, sentí esa emoción cuando recibes mis besos, sentí la seguridad de saber que estoy allí.
Hoy caminé de tu mano y descubrí mi alegría, esa sonrisa inexplicable que provocas con sólo saber que existes, descubrí mis miedos, de no saber que hacer o que decir, sentí mariposas en el estomago, sentí esa pasión que transmite tu piel, la dulzura de tus besos.
Hoy caminé de tu mano y encontré un sendero diferente, una vía especial, encontré dos huellas que se encontraban y se unían en la arena, dos huellas diferentes que se llevaba el mar...
Hoy desperté de un profundo sueño, y en mi sueño, hoy, caminé de tu mano.

Con los ojos cerrados...

Cerré los ojos y sonreí...
Mientras pensaba en ti...
El silencio era cómplice de mis recuerdos junto a ti...
Cerré los ojos y pensé...
Lo rápido que pasa el tiempo...
Sobre todo cuando es junto a ti...
Cerré los ojos y soñé...
Con cada uno de tus besos...
Cerré los ojos y sentí...
Sobre mi piel una vez mas, la suavidad de tu piel...
Hoy...
Cierro los ojos y sonrío...
Pensando en ti...
Cierro los ojos y se estremece mi piel...
Recordando tu piel..
Cierro los ojos y suspiro...
Con el sabor de tus besos...
Cierro los ojos y soy feliz...
Con el tiempo...
Cerraré los ojos y pensaré...
Como detener el tiempo junto a ti...

Cerraré los ojos y soñaré...
Con la forma de tus manos...
Tus manos dibujando mi piel Cerraré los ojos y sentiré..
El sabor de tus labios...
La dulzura de tus besos...
Cerraré los ojos y seré feliz...
Con el recuerdo de las noches junto a ti...
La luna saldrá y bajo su luz una vez mas cerraré los ojos...

hojas

Una a una caen las hojas, se descubre el capullo, se muestra la flor...
Una a una caen las gotas, cantando al unísono su canción, viviendo en conjunto su eterna soledad...
Soledad del viento que sopla en mi rostro que se lleva la lluvia de mis ojos la felicidad de aquel segundo...
Segundo en el que te vi, en el que te amé, en el que el tiempo se hizo eterno y se volvió magia...
Magia de tus ojos, magia en tus besos, besos que te llevan al cielo, que regresan a la tierra y te hacen parte de la naturaleza...
Naturaleza que es cómplice, que envuelve mi euforia, que me lleva al éxtasis con recordar tu sonrisa, la suavidad de tus dedos como la caricia de una hoja...
Hoja que cae con el tiempo...
Capullo que se vuelve flor...
Flor que es amor.. Mi amor...

Contigo Aprendí

Contigo aprendí que un beso puede ser eterno, que puede encerrar pasión y ser dulce, que un instante se vuelve eterno, que solo contigo se vuelve mágico. 

Contigo aprendí que los abrazos son sanadores, que unos brazos pueden ser protectores, que en tus brazos todo se vuelve perfecto. 

Contigo aprendí lo que es una caricia, tus dedos sobre mis mejillas, tu mirada tierna, tu susurro suave... También aprendí, que en soledad la tristeza se vuelve inmensa, el silencio se hace eterno y las lágrimas hielan el corazón. 

Aprendí a extrañar a escondidas, a dibujar sonrisas entre sollozos, aprendí a mirar a los ojos y enterrar el sufrimiento. 

Aprendí que el tiempo es selectivo, vuela en la alegría y se detiene en el dolor.

Aprendí a reconocer que me haces falta, aprendí a dar y recibir un beso, aprendí a hacer el amor y soñar... Hay una cosa que aún no aprendo, aún no sé como no extrañarte, como sacarte de mi mente, como borrarte de mi piel, aún no sé como no quererte. 

Desearte se ha vuelto una agradable tarea, pensar en ti, un eterno castigo que alimenta mis deseos, agranda mis pasiones y enciende mi pena... 

Solo sé decir lo siento... 

Te extraño, me haces falta...

Extraño...

Extraño las ausencias en mi vida, los besos, los abrazos y caricias, las miradas, los suspiros, los te quiero, el te amo.
Recuerdo con cariño, las palabras susurradas al oído a media luz, los secretos contados, los mil y un sonidos encerrados en una habitación.
Anhelo sentir una vez mas, mariposas en el estómago, escalofríos al sentir cerca una piel, sonreír con solo pensar, pensar y ser feliz.
Sueño con cada recuerdo conservado, con cada vivencia guardada en un sobre de cristal, con cada uno de los detalles de una historia.
Deseo contar una historia diferente, un final feliz, un sueño despierto, una fantasía real.
Extraño esos sentimientos y sensaciones, razones y pasiones...
Extraño ser yo.

Tú

Tengo una debilidad por tu mirada,

una fijación por tus silencios

y curiosidad por tus besos...

Sonrío con solo pensarte,

suspiro recordándote

y anhelo siempre volver a verte...

Miento deliberadamente por no mostrarte mi debilidad,

ya conoces el color de mis sonrisas,

el sabor de mis miedos

y has recorrido mis lágrimas con tu mirada...

Eres tan predecible e imaginable que es simple soñar contigo,

despertar con la dulzura de tus ojos...

A pesar de mi distancia,

estas tan cerca de mi corazón...

Eres ese pedacito de bien que me hace mal,

la razón de mis líneas,

el motivo de mis sueños,

el creador de mis motivos.

Esperar, desear, sentir...

Tengo una duda en mi mente, un vacío en mi corazón, un espacio esperando en medio de mi alma... Eres una bruma que envuelve, una suave brisa que acaricia un susurro en el viento que embriaga... Quiero una fuerza profunda, busco incansablemente una caricia a mi alma, un dueño de mis pensamientos, una razón para mi corazón... Quiero que seas más de lo que pretendes, que admitas más de lo que tu boca dice, que regales todo lo que dibujen tus dedos, lo que siente tu corazón... Quiero cerrar los ojos y pretender ser un sueño, buscar esos sentimientos en un cajón de recuerdos, encontrar eso que provocabas en mí en un rincón de mi alma... Deseo crear una fantasía, necesito creer una mentira si es necesario, enterrar los miedos junto a mis prejuicios, matar de a pocos la realidad... Quiero soñar contigo dormida y despierta, grabar en mi piel cada surco de nuestro tiempo, quiero contra todo pronostico suspirar al esperar el segundo de abrazarte... Tengo mil y un razones para morir en tus brazos, pero solo necesito una para correr y vivir eternamente en un beso tuyo... Bendita mentira que crece despacio y de a pocos, que busca expandir sus ramas sin tener raíz, que busca llegar a la cima sin desplomarse, que es todo en un segundo, en un suspiro, en un beso, que muere al cerrar la puerta de tu voluntad... Quiero dejar de pensar en motivos y razones, sentir en piel y espacio, dejarme llevar por tu voz... encontrar en ella lo que mi alma necesita escuchar... Quiero esta noche cerrar mis ojos y solo soñar... Cerrar mis ojos y encontrarte en mis sueños... Cerrar mis ojos y sonreír.

Secretos, historias y mentiras...

Quiero contarte un secreto

Un secreto guardado en lo mas profundo de mi ser.
Un secreto contado desde mis recuerdos.
Grabado en mi mente.
Quiero contarte una historia.
Una historia desde mi corazón.
La historia de mis sentimientos de mis emociones,
de lo que provocan en mí.
Quiero contarte una mentira.
Una mentira creada desde mis deseos,
desde mis más profundos anhelos,
de los apetitos de mi alma.
Un secreto que se vuelve historia, que termina siendo mentira.
Una mentira que se vuelve secreto y se convierte en historia.
Una historia que es una mentira y se vuelve secreto
Hablo con los ojos, grito con caricias, guardo silencio con besos.
Mis ojos escriben historias entre las líneas de tu rostro, caen en mentiras en las comisuras de tus labios, se vuelven sentimientos en un suspiro.
Guardo profundamente en mi mente aquellas mentiras de mi corazón que se volvieron reales en tu piel y que hoy son historias en el viento, secretos del tiempo.
Hoy que volteo la pagina quiero mentirle a mi historia y volverte real, crearte en un secreto y gritarte como verdad solo para convencerme que aún sigo viva, que aún siento en silencio que las lágrimas aún son reales y que el tiempo sigue pasando para el mundo a pesar de haberse detenido para mi corazón.

Busco Razones...

Doy un paso, me detengo cierro los ojos y siento, el aire frío que roza mi piel, el bullicio aquel que acompaña las calles, la oscuridad que inunda las miradas. Tapo mis oídos y finjo sonreír, dibujo en mi rostro la careta correspondiente en respuesta a un saludo náufrago en el inmenso océano de desconocidas miradas que flotan a mi alrededor.

Doy un paso más, inconsciente del camino trazado, de las alternativas del momento, del color de las elecciones, inconsciente sobretodo de mi propio querer.

Continúo avanzando sin destino conocido, sin saber adonde ir, como llegar pero sobre todo sin saber porque llegar.

Busco de forma incansable y desordenada razones fuertes y profundas, razones que como raíces se aferren a un suelo propio, a una idea profunda, un sentimiento perfecto que provenga del corazón.

Cierro mis ojos y abro mis sentidos, para aprender a mirar con el corazón, ver mas allá de personas, sentimientos; mas allá de miradas, sueños.

Busco un sentimiento, anclado en medio de un corazón, rodeado de besos y caricias que llenan por completo una vida con solo existir un segundo.

Sabores y aromas que se vuelvan inconfundibles, irremplazables, que con solo cerrar mis ojos pueda casi tocarlos en mis recuerdos.

Busco algo que no sé que es, que sé me hace falta porque siento su vacío, porque su ausencia es profunda y hiere, porque duele el no tenerla.

Razones, causas y motivos, esos que desaparecieron de mi vida con su mirada, que aun no llegan de la mano de sus besos, que no se escucha aun en multitud... Las busco aun sin saber que es, con la certeza de atinar al encontrarlas, con la fe de su existencia y la esperanza de su pertenencia.

Busco razones en vacío, busco razones en lluvia, deseo encontrarlas en lleno y junto a un arcoirirs.

Bruma...

Aprieto los ojos con fuerza, buscando recrear una imagen, una figura perdida en el fondo de mis pensamientos, una sombra guardada en alguno de mis recuerdos. 

Afino con cuidado mis oídos, tratando de escuchar a lo lejos, entresacando en el ruido del viento, esa melodía que es tu voz. 

Busco a tientas en la oscuridad, rosar nuevamente la suavidad de tu piel, esa piel que eriza mis sentidos de solo imaginarla. 

El olor de tu perfume, ese aroma que embriaga la lucidez de mi mente.

El sabor de ti, de tus besos, de tu alma contenida en un rose de tus labios. 

Te busco incansablemente en mil y un recuerdo, navego entre ojos y miradas, sonrisas y voces ahogadas en el ruido de multitudes, en el grito solitario de un mudo, en aquellos engaños de mi mente, escapes de mi soledad. 

Anhelo encontrarte en uno solo, mientras te armo despacio destacando entre muchos lo que quiero de ti.

Quiero aunarme a un rompecabezas, separarme de la multitud y ser uno entre miles, siendo dos en la distancia, siendo nada entre sueños, siento todo en un segundo. 

Pierdo la noción del tiempo y el espacio, suspendida de tus brazos, abrazada a tu mirada. 

Reacciono con el olor de tu piel y el dulce susurro de tu voz agudiza mis sentidos, envenena mis sueños, mata mis temores, despierta en mí un sin fin de sentimientos y emociones, descifrados solos y finalmente en tu mirada perdida entre mis ojos. 

No quiero quererte, ni depender de ti, quiero morir abrazada a tu recuerdo, despertar cada mañana con tu imagen reflejada en una ilusión. 

No sé como dejarte libre si nunca estuviste aquí, no sé como atraparte sin necesitarte en mí. 

Es complejo y complicado, que despiertes mis sentidos, y apagues mi mente, dejando funcionar por inercia mi corazón. 

Tengo miedo de atraparte en una urna de cristal siendo tú aire, siendo tú fuego, apagarte sin haber terminado de encenderte sería fatal. 

Me pierdo entre mis pensamientos, que son tuyos sin haber nacido de ti. 

¿Cómo explico lo que no entiendo, cómo acepto lo que desconozco, cómo termino lo que no ha empezado?

Dime tú, extraño sentimiento, ¿se puede ser sin existir?

Huellas...

Se me escapó entre los dedos, aún sin ser mío. El aire se llevó su aroma, la brisa del mar confundió entre sus olas el olor de su piel, el perfume que enamoraba mis sentidos, se fue lentamente como la luz se escapa de mis ojos al terminar el día. El tiempo quiso borrar sus huellas, una fina capa de historias y sentimientos, cubrió cual delicado manto sus recuerdos, se fue llevando de a pocos el sabor de sus besos, el calor de su voz, el color de su mirada, esa mirada que aún llevo en mi mente, esa, que lo devolvió al presente de mis pensamientos. No entendí aquel instante, ese segundo mágico que lo devolvió a mi vida, que me hizo imaginarlo presente en el tiempo, aunque ya no era él, el del pasado. Quisiera entender el laberinto en el que me sumerge con sus caricias, el abismo al que me lleva con sus besos, a ese camino sin retorno que es dejarlo entrar en mi vida una vez más. Hace mucho que necesitaba, deseaba e imaginaba como seria sentir de nuevo mariposas en el estómago, pensarlo y sonreír, soñar despierta, dormir soñando, enamorarse. Esta aún demasiado en el presente, yo vivo aún demasiado en el pasado, como una historia paralela de cartas en el tiempo, vivo queriendo regresar al pasado y traerlo al presente para construir un futuro. Lástima que los sueños se queden en la almohada, y las ilusiones se pierdan con el tiempo, lástima que me enamore de un recuerdo y viva la aventura de una historia sin presente ni futuro con pasado a medias sin final.

Ilusiones...

Un suave aire golpea mi puerta... Un aroma se cuela entre las rendijas de mi ventana... Esa sensación de burbuja, que me hace volar, esa nada que en un segundo se vuelve todo... Ese todo que no basta... Que es nada con solo imaginar lo que falta... Una brisa que envuelve, un espacio inmenso que se reduce a una mirada, un silencio eterno, un rose, una palabra... Es inexplicable el sentimiento que nace de un encuentro, las razones que sobran de un suspiro, lo que llena el imaginar un beso. Es grandioso cerrar los ojos y sonreírte en mi mente, convertirte en pregunta y respuesta, liberarte en un abrazo, encerrarte en un beso, soñarme despierta a tu lado, conmigo sin ti. Encuentro mil razones en tu mirada, mil preguntas en tus silencios, una excusa en mis miedos... Es tan grande el espacio que el miedo ocupa en ese milímetro que me separa de ti, que aun sabiéndolo todo no encuentro la respuesta de mis temores. ¿Es acaso tan complicado decir te quiero? Y sin saberlo te lo repito en cada segundo de mi tiempo, cada latido de mi corazón, cada célula de mi piel... Cruel ilusión clavada en mi pensamiento, tatuada en mi piel, nacida de mi corazón, llegaste para morir sin ser descubierta en una vida en la penumbra del anonimato, hijastra del miedo y la cobardía... Ilusión aquella que me arrebata la vida y me regala razones, esas que te dan lágrimas disfrazadas de sonrisas... Esas que tú me arrancas, cerca y lejos, sin saberlo...

Tu beso

Un instante me separa de tu boca, una decisión.

Siento tu respiración, miro tus ojos, tiemblo.

Me acerco en un segundo un abismo de distancia y no rozo siquiera tus labios.

Te miro nuevamente, y me estremezco, se me hace eterno el instante.

Quiero detener el mundo en este estallido de emociones, en este instante mágico en que me haces volar.

Cierro los ojos para sentir una vez mas, aquel aire tibio que rozaba mis mejillas mientras el calor de tus labios enterraba mi voluntad.

Vuelvo en el tiempo, siento aquellos brazos protectores desmayar en un instante, sucumbir ante una caricia, caer derrotados en un abrazo.

Quiero recordar todas las batallas perdidas de mi fuerza ante tus labios, todas las horas colmadas de besos furtivos, esos que ahora anhelo, todos los instantes mágicos perdidos en la línea de nuestro tiempo... Todo en búsqueda de un beso, tu beso.

Un instante me separa de tu boca, una decisión.

Siento los latidos de tu corazón, el sudor frío de tu piel, respiro.

El espacio se hace inmenso en este instante mágico, en donde la tierra deja de girar, este segundo en donde la perfección se vuelve real.

El aire es demasiado entre tu y yo, los recuerdos se graban cual tatuajes en la piel, y debilitan mis sentidos, para caer por voluntad propia en tus brazos, sumergirme en este recuerdo, para llenar de vida a un desahuciado corazón.

Retrocedo en el segundo aquel que tus labios me devolvieron la vida en aquel beso delicado de amor.

Quiero volver cada segundo de mi tiempo y enmarcarlo en solo un segundo, hacerlo eterno, en recuerdo de ese beso, tu beso.

Es que no sabía hasta ayer lo que era un beso, y hoy nuevamente no lo se, solo cerca a tus labios, en ese segundo perfecto en que el mundo se detiene, nace y muere el significado de un beso, tus labios y los míos, creadores de ese estado mágico, nos devuelven su fantasía, por que solo es mi deseo de un beso, tu beso.

Pensamientos...

Apago la luz, mientras la balada susurra en la oscuridad. Cierro mis ojos buscando sentirte cerca como la primera vez. Selecciono en mi mente de entre tus besos, el primero, aquel que desató ese volcán en erupción. Escojo entre tus caricias, la suave yema de tus dedos en mi rostro. Suspiro en silencio, en medio de la noche, al lado de la soledad, anhelando tu olor. Repaso en mi memoria la mas cálida de tus sonrisas, retengo en mi consciente por un segundo el sabor dulce de tu voz. Te sueño, te pienso, te recuerdo, te anhelo... Te espero. Vuelvo a abrir mis ojos en la oscuridad, miro al lado de mi cama, imaginando tu compañía fundida en un abrazo eterno. Magia en el aire de mis fantasías, polvo de hadas en mis sueños, conjuros echados al viento de mis ilusiones y una oración de fe por mis mas secretos anhelos. Cierro mis ojos una vez mas, para contemplar tu dulce mirada, para sentirte cerca una vez mas, para saberte real y no fantasía, para encerrarte en mi mente y ser parte de ti y tú de mi.

Este recuerdo....

Hay una luz al fondo de la habitación, me acerco despacio en medio de la oscuridad, a mi alrededor una atmósfera tibia me envuelve, una sensación ya conocida, ese aire suave que despierta mis sentidos se parece mucho a ti. Cierro mis ojos y dibujo lentamente en mi mente cada detalle, el aroma del mar, las estrellas, tú, yo, y este recuerdo. Aprieto mis ojos muy fuerte, quiero capturar cada sensación, cada sonido, todas aquellas cosas que lo han hecho tan deseable, que aspiran por convertirlo en inolvidable. El mundo puede parar, dar un vuelco y volver a andar, esta noche, este deseo es aún más grande, más fuerte, más profundo, único, como el aroma del mar, como la suavidad del aire, como la luz de la luna, como tú, como yo, como este recuerdo.

Quiero aprender a dibujar...

Quiero aprender a dibujar...

Dibujar una idea, positiva, grande y fuerte, que tenga en ella todas las ideas positivas de aquellos que como yo guardan en lo profundo de su pensamiento todas sus ideas, buenas o malas, pero anónimas.

Dibujar una lágrima, por todas aquellas lágrimas que no me atrevo a derramar, por todas aquellas enjugadas, que escondí y que aún escondo, por el miedo de los demás hacia mis tristezas, por la envidia ajena de mis alegrías, por el simple temor de verla nacer y morir en mi rostro.

Dibujar un abrazo, aquel que anhelo profundamente y que no encuentro, no aparece en mi presente, del cual tengo un vago recuerdo en el pasado, ese abrazo protector, grande y fuerte, suave y delicado a la vez, ese abrazo que transmita todo y se lleve todo, ese abrazo que aun no encuentro.

Dibujar un sentimiento, en donde pueda plasmar todo de mi, mis alegrías y tristezas, mis anhelos mas profundos, que lleve consigo todo mis sentimientos, que entienda y acepte mis silencios, que sonría conmigo, y seque mis lagrimas o las deje morir junto a su corazón en ese abrazo esperado.

Dibujar un corazón, no como el mío, un corazón sano de heridas, que pueda sentir sin temor, sin rencor, que pueda dar todo lo que lleva dentro, y que sea capaz de recibir todo lo que quieran brindarle.

Dibujar finalmente una sonrisa, que lleve consigo todo de mí, mis ideas, mis alegrías, mis tristezas, mis sentimientos, mis besos y abrazos, que muestre todo el corazón, para darle a alguien que como yo, necesite de ella.



Tengo un oscuro pensamiento en mi mente, un sentimiento sombrío se apodera de mi ser, esa sensación de ausencia que me roba la sonrisa, que delata mis mas grandes temores y me vuelve vulnerable en un segundo.

La fuerza que impulsa mi interior se escabulle en una fuga interminable de pasión deseo y anhelo.

Un espacio vacío inunda y destroza a su paso cualquier indicio de alegría, cualquier salvavidas que intente rescatar la parte que alguna vez fue buena de la historia, esa historia que se escribe al segundo que respiro.

Suena la cura tan fácil, la solución tan practica y sencilla que es difícil de creer, pero aun no consigo hallarla, y me sumergo cada vez mas profundo en este hoyo sin salida, en este túnel sin fin, húmedo y frío, solitario como la lágrima aquella que se escapa en mis sueños.

Busco intensamente el antídoto a la costumbre y la rutina, que despierte la pasión perdida, que encuentre las razones de un nuevo día.

En el día de la madre....

Las palabras se escapan de mi mente, huyen de mí como yo quisiera poder huir de mi misma. Mi mente, ese cajón oscuro en dónde aún no se procesa el suceso aquél que te alejó de mis manos, está adormecido, entumecido en un sin fin de emociones que lo sumergen en un letargo del cual no ha salido y le falta valor para intentar salir. 

Hace un año no imaginaba siquiera que este día me tocaría vivir, en realidad nunca lo pensé, jamás imaginé como sería un día sin ti. 

Hace ya casi cinco meses que no vivo, mi existencia se ha vuelto una caricatura en blanco y negro, en donde hay chispazos de color, pero la esencia de la historia está escrita con un oscuro carbón. 

Quiero gritar, llorar y sumergirme en algo que me quite este sin sabor, este amargo dolor que está enquistado en el medio de mi corazón, esta culpa atornillada a mi mente y a mis sentidos, esto que no sé cómo se llama, que no me deja vivir. 

Porque siempre has sido tú la razón de todo, la única que siempre tuvo todas las respuestas, el motor que empujaba el tren en el que me convertiste, porque todo lo bueno que pueda tener, te lo debo a ti, porque el hecho de levantarme cada mañana aunque no estás, es por ti. 

Perdóname por las lágrimas que aún derramo, por la fuerza que me falta para que este tren siga su curso, por la cobardía que aún tengo para luchar por ser lo que tú más anhelabas para mí... felicidad. 

Quiero quitarme del alma este egoísmo profundo que no me deja resignarme. 

Perdóname mamá por no poder decirle a alguien más que sea feliz junto a su mamá cuando tú no estás a mi lado. Mi vida nunca volverá a ser la misma,... pero ayúdame a que sea como tú la querías.... Te amo mamá. 

Hace un mes...

Hace un mes que no te veo, pero tengo tu mirada grabada en mi memoria, tengo dibujados los contornos de tu rostro en la línea de mi mente.

Hace un mes que te busco, incansable y profundamente, en cada suspiro, debajo de cada sueño para encontrar las fuerzas del día.

Hace un mes que me dejaste y aún lloro en cada esquina buscando sentirte de nuevo, abrazarte una vez más.

No puedo creer que ya pasó un mes, treinta días sin oír tu voz, treinta razones más para extrañarte cada segundo de mi existencia, treinta motivos para amarte con cada célula de mi cuerpo.

¿Cómo sobreviviré sin ti? Aún me pregunto al final de cada día, escarbo en mi mente las razones por las que las horas no se detuvieron aún, la única respuesta que encuentro es el silencio.

Aún miro con ansias la puerta de ese cuarto, espero que en cualquier segundo se abra, y correr a tus brazos y sin hablar tratar de unirme en uno contigo por que no sé seguir sin ti...

Hace un mes, treinta días que el cielo se volvió gris, la luna se escondió y el sol no quema igual.

Quiero gritar llorar y cobijarme en ti, porque sólo tú puedes consolar este dolor tan grande...

Hace un mes que te dejé ir, y aún no pago mi condena, la culpa es una carga pesada que no es suficiente por ese delito.

Hace un mes que anhelo no despertar más para en este profundo sueño encontrarme contigo y quedarme a tu lado.

Hace un mes que descubrí que no soy fuerte ni grande, soy aún esa pequeña que se escondía tras tus piernas.

Hace un mes que te busco, te necesito y te llamo, hace un mes que cargo en mi conciencia el no haberte retenido, el ser egoísta y necesitarte.

Hace un mes que no te veo... y diera todo lo que existe en el mundo por verte sólo una vez más mamá.

El abrazo de mamá

Mi mente es un vacío lleno de nada...

Un acumulado de deseos a medias, pensamientos inconclusos, partes de un rompe cabeza incompleto que no sé por dónde empezar.

A media noche volteo a mirarte, aprieto fuerte mis ojos para escuchar en mi mente tu respiración, quiero volver a sentir tus caricias en mi cabeza, sólo quiero abrazarte una vez más.

Siento que no he derramado suficientes lágrimas, mi corazón siente que te falló, no te demostré cuanto te amaba y ahora ya es inútil este dolor.

No entiendo mi mundo, quiero hacer todo y a la vez nada, quiero llenar un vacío imposible de llenar, ese espacio que dejaste en mi vida, en mi mundo, ese todo que eras tú y ya no estas.

Quiero estar con todos y sola a la vez no entiendo, no proceso lo que sucedió.

Busco incansablemente ese abrazo protector y sincero que entienda todo esto que pasa por mi mente... pero ya no estás...

Enséñame cual es el camino a seguir, las pautas del sendero que me lleve a sonreír, me haces tanta falta, aún no logro aceptar que no estas más.

Creo oír tus pasos cada día, aún tengo la esperanza de abrir la puerta y encontrarte ahí...

Envíame un mensaje por que no sé si podré seguir sin ese abrazo tuyo... mamá.